Reconozcámoslo: nos encanta poner etiquetas. Sí, además de las de Twitter, etiquetas para nombrar a la sociedad y al mundo que nos rodea. Que si 'era digital', que si 'generación ni-ni' y, por supuesto, 'escuelas 2.0'. Ya en mi época como alumna de secundaria, una profesora decía que éramos la 'generación de la tecla', en clara alusión al teclado del ordenador. Vamos, que todo esta terminología aplicada a la educación viene de lejos.
Para mí, todo lo que tiene que ver con el 2.0 significa interactividad a través de la tecnología. En el ámbito educativo lo entiendo como un cambio metodológico más que de herramientas. Así, concibo la 'escuela 2.0' como aquella que utiliza las TIC para que los alumnos investiguen, colaboren y desarrollen un espíritu crítico; en definitiva, que dejen de ser sujetos pasivos de clases magistrales. Si se usan las TIC para seguir con el discurso monótono del profesor, no sirve de nada la pizarra digital ni el libro electrónico.
Por supuesto, la tecnología es importante en la escuela 2.0: disponer de ordenadores, portátiles, conexión WIFI, etc. Ya sabemos los problemas que hay sobre esta cuestión en los centros y fuera de ellos, pues hay alumnos que carecen de acceso a Internet en sus hogares. Si a esto le añadimos el rechazo de muchos profesores y padres sobre las TIC porque no las 'controlan', el fracaso de la escuela 2.0 está asegurado.
Por otro lado, creo que la escuela 2.0 ya no son solo las 6 horas diarias de clase en el instituto. No digo que sea un servicio de 24 horas por parte del profesor, pero sí bastante más amplio. Toni Solano lo explicaba muy bien en esta charla: ¿por qué el alumno tiene que esperar dos días para resolver una duda cuando enviando un correo electrónico el profesor la puede resolver en media hora? Y voy más allá: si ya sabemos que en Internet el alumno lo puede encontrar todo, ¿por qué no dedicar las horas de clase presenciales a que hablen los alumnos?
Os dejo un enlace de nuestros amigos de Eduskopia en el que resumen la primera parte del congreso 'School 2.0' que se celebró la semana pasada en Madrid y en el que se profundizó sobre todas estas cuestiones. En concreto, estoy muy de acuerdo con el Modelo Flipped Clasroom que viene explicado en el último punto y que está relacionado con las teorías constructivistas.
Os dejo un enlace de nuestros amigos de Eduskopia en el que resumen la primera parte del congreso 'School 2.0' que se celebró la semana pasada en Madrid y en el que se profundizó sobre todas estas cuestiones. En concreto, estoy muy de acuerdo con el Modelo Flipped Clasroom que viene explicado en el último punto y que está relacionado con las teorías constructivistas.
Por último, una pregunta y una respuesta: ¿se puede hacer una escuela 2.0 sin las TIC? Rotundamente, no.